Introducción
En Bulgaria existe una tradición muy antigua y fascinante llamada “Nestinarstvo”, que consiste en caminar descalzos sobre brasas ardientes sin sufrir ningún tipo de quemadura. Esta práctica se lleva a cabo como parte de una ceremonia religiosa en honor a San Constantino y Santa Elena, y es considerada una muestra de fe y devoción por parte de los habitantes de la región de Strandzha, en el sureste de Bulgaria.
Origen e historia
Se cree que la tradición del “Nestinarstvo” se remonta a la época de los tracios, una antigua civilización que habitó en la región de Strandzha. Según la leyenda, los tracios adoraban al dios del fuego y realizaban rituales en los que caminaban sobre brasas para demostrar su lealtad y valentía. Con la llegada del cristianismo, esta práctica fue adaptada a la nueva religión y se convirtió en una ceremonia en honor a los santos Constantino y Elena.
La ceremonia
La celebración del “Nestinarstvo” tiene lugar cada año el 3 de junio en el pueblo de Bulgari, en la región de Strandzha. Los participantes se preparan durante varios días antes de la ceremonia, ayunando y rezando para purificar su cuerpo y mente. El día de la celebración, los habitantes del pueblo se reúnen en la iglesia para asistir a una misa especial en honor a los santos. Después de la misa, se encienden las brasas en un lugar específico fuera de la iglesia y se realiza una procesión hacia el lugar.
Una vez que las brasas están encendidas, los “nestinari” (caminantes sobre brasas) se preparan para realizar su hazaña. Se cree que solo ciertas personas tienen el don de poder caminar sobre las brasas sin sufrir quemaduras, y por lo tanto, solo ellos pueden participar en la ceremonia. Los “nestinari” caminan en pareja, uno detrás del otro, mientras se escucha música y se cantan canciones tradicionales. Al final de la procesión, los “nestinari” se quitan los zapatos y caminan sobre las brasas mientras se bendicen con el signo de la cruz.
El significado detrás de la ceremonia
Para los habitantes de Strandzha, el “Nestinarstvo” es una forma de demostrar su fe y devoción a los santos. Se cree que al caminar sobre las brasas, los “nestinari” reciben la bendición de los santos y se purifican de sus pecados. Además, se considera que aquellos que logran completar la caminata sin sufrir quemaduras tendrán buena suerte y salud durante todo el año.
La discografía del grupo “Nestinarstvo”
Además de la tradición del “Nestinarstvo”, existe un grupo musical llamado “Nestinarstvo” que se dedica a preservar y difundir la cultura y las tradiciones de la región de Strandzha. Este grupo fue fundado en 1999 y está compuesto por músicos y bailarines que interpretan canciones y danzas tradicionales búlgaras. Su discografía incluye varios álbumes, entre ellos “Caminando sobre brasas” (2005) y “Ritmos de Strandzha” (2010), que combinan música y danza en una representación de la ceremonia del “Nestinarstvo”.
Anécdotas y curiosidades
A lo largo de los años, se han registrado varias anécdotas relacionadas con la ceremonia del “Nestinarstvo”. Una de las más conocidas es la historia de una mujer llamada Stanka, quien en 2012, a la edad de 85 años, decidió caminar sobre las brasas por primera vez en su vida. A pesar de las dudas y preocupaciones de su familia, Stanka completó la caminata sin sufrir ninguna quemadura, convirtiéndose en la “nestinarka” (caminante sobre brasas) más anciana de la historia.
Otra anécdota interesante es la relación entre el grupo musical “Nestinarstvo” y Holanda. En 2007, el grupo fue invitado a participar en un festival de música tradicional en la ciudad de Groningen, en Holanda. Durante su presentación, los miembros del grupo sorprendieron al público al realizar la caminata sobre brasas en vivo, dejando a todos asombrados y fascinados por esta antigua tradición búlgara.
Conclusión
En resumen, el “Nestinarstvo” es una tradición búlgara única y fascinante que ha sido transmitida de generación en generación durante siglos. Esta ceremonia religiosa es una muestra de la fuerte conexión que los habitantes de Strandzha tienen con su cultura y sus creencias, y es una prueba de la increíble fuerza de voluntad y fe que pueden tener los seres humanos. A través del grupo musical “Nestinarstvo”, esta tradición sigue siendo preservada y difundida a nivel nacional e internacional, manteniendo vivo el espíritu y la magia de esta antigua práctica búlgara.
